Ha sido un concienzudo estudio, con muchas horas de seguimiento y una medodología estricta.
Todo comenzó al ver un coche con una rueda subida en la acera. Nadie le daría importancia a menos que vea otro, y otro, y otro más, ...y entonces empiezas a pensar que en tu autoescuela no te explicaron algo que a ellos en Alemania sí que les explican.
Los datos aportados han sido recopilados en mi calle (básicamente) por lo que la muestra no es representativa....o sí, porque estoy seguro que si me doy una vuelta por ahí, me hincho a sacar fotos.
He preguntado a un habitante local si esta costumbre se debía a algún factor relevante, y ello me ha conducido (nunca mejor dicho) a una conclusión importante:
No es para encontrar su coche en caso de no saber dónde está, ni para sacarlo de la nieve con más facilidad. Simplemente es que aparcan como el culo.
Como objetivo para próximos estudios, intentaremos grabar un vídeo sobre la peculiar forma que tienen los habitantes de esta bonita ciudad a la hora de aparcar. Es decir, no solo aparcan con una rueda encima de la acera, sino que el procedimiento que utilizan es, digamos... sorprendente: Trata de aparcarlo, Carlos, trata de aparcarlo por Dios...
